Un jardín donde protegernos, donde nadie más entra, sólo nosotros …y en ocasiones ni eso. Hay días que lo cubre la bruma pero siempre hay una flor, un pájaro rezagado en su migración que nos acompaña y sobre todo, sobre todo está rodeado de árboles que de vez en cuando florecen y se ponen gordos de hojas y de alegría y miran a un cielo que despierta loco de azul….